¿Qué voy a ganar con esta carrera en esta universidad?
En Waukee, Iowa este fin de semana, Marco Rubio reiteró su propuesta para asegurar que los estudiantes y sus familias obtengan todos los datos acerca de las opciones de elección que tienen en un colegio o universidad dados, antes de que acepten préstamos estudiantiles:
“Creo que antes de que cualquiera de nuestros jóvenes acepten préstamos estudiantiles, la escuela tiene que decirles cuánto dinero podrían ganar una vez que se gradúen de esa carrera en esa escuela de manera que la gente pueda decidir si vale la pena pedir préstamos de decenas de miles de dólares para especializarse en algo que no tiene valor profesional o práctico”.
Luchar para pagar los préstamos estudiantiles es un reto que Marco conoce de primera mano:
“Cada semestre firmaba el pagaré para pedir prestado más dinero. Nunca me senté a calcular cuánto dinero podría ganar una vez que me graduara y si éste sería suficiente para pagar las cuotas del préstamo. No había ninguna fuente que me proporcionara esa información tampoco.
“Por último, en 1996 me gradué de la escuela de leyes. Tenía un título de Doctor en Leyes en una mano y más de $100,000 en préstamos en la otra. Luego, unos meses más tarde, las facturas comenzaron a llegar.
“En mi primer trabajo bien remunerado para un joven abogado, ganaba más de $50.000, que era por encima de lo que cualquiera de mis padres jamás había ganado. Pensé que era rico. Pero estaba viviendo con mis padres y les pagaba alquiler. Estaba tratando de ahorrar para mi boda y por supuesto para comprar una casa. Y cuando los $1,500 dólares de facturas mensuales para pagar mis préstamos empezaron a llegar, me di cuenta de que no podía pagarlos.
“Así que hice un aplazamiento y aguanté el pago durante un tiempo pagando sólo los intereses. Pero los préstamos rápidamente se convirtieron en mi gasto más grande. Recuerdo que mirando el libro de cupones para el pago de uno de ellos me di cuenta de que al ritmo que estaba pagando estas deudas, no podría liquidarlas hasta que tuviera más de 50 años “
El problema es que estamos tratando de preparar a las personas para la nueva economía mediante un sistema de educación superior construido para la vieja economía. Como resultado, muchas industrias altamente calificadas y bien remuneradas sufren de una escasez de mano de obra, mientras que muchos sectores de baja remuneración sufren de un superávit.
- En la próxima década, el 63 por ciento de los puestos de trabajo requerirán formación postsecundaria.
- Si las tendencias educativas actuales continúan, nos quedaremos cortos con 300.000 personas por año para llenar estos puestos calificados.
- A nivel nacional, carreras como Administración de Empresas, Artes liberales, y Turismo tienen tasas de subempleo del 50 por ciento o mayor.
- Ingeniería, Servicios de Salud y Educación todas tienen tasas de subempleo de menos del 25 por ciento
Los estudiantes y sus familias deben estar equipados con la información necesaria para tomar decisiones inteligentes acerca de cuáles carreras y en qué instituciones pueden obtener el mejor beneficio de su inversión. Esta es la razón por la que Marco ha escrito y defendido la Ley “El Derecho del Estudiante a Saber Antes de actuar” que tiene como objetivo dar a los estudiantes los datos fiables sobre cuánto pueden esperar ganar versus la cantidad que esperan deber.
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